14 de agosto de 2009

Un poco de fresquito

Poco a poco va llegando el final de mi jornada laboral y aunque solo sea para que pase la media hora que me queda voy a dejar unas reflexiones por aquí. En este caso voy a ir de lo más particular aunque sin dar nombres a lo más general.

Ahora son varios compañe@s los que se van de vacaciones. Unos ya se fueron, yo ya volví y ahora les toca a ell@s. Igualmente, en el día a día, cuando llamas a algún colaborador o proveedor también les pasa lo mismo.
Además, al vivir en la Costa del Sol tenemos que a la gente le gusta venir aquí a veranear y tu vas con tu ropa de trabajo y ellos, no todos, a pecho descubierto. Bueno, a parte de la falta de respeto con esa actitud, hay que reconocer que tienen todo el derecho del mundo a disfrutar de sus vacaciones.

Por cierto, me dicen algunos amigos de los que nos suelen visitar, que este año hace un poco menos de calor. No se, no se, yo estoy igual de pegajoso que siempre con esta humedad. Y para refrescarnos un poco os envío este vídeo que es una maravilla.

Que paséis un buen verano.

Arturo Reque Mata.


4 de agosto de 2009

No es por dar envidia









Benditas vacaciones.
Recién regresado de las vacaciones y quedando todavía por delante un mes de agosto, no puedo ni quiero dejar de recordar los maravillosos momentos vividos con la familia por tierras del norte de España. Son más de 30 años visitando esas tierras y no puedo dejar de asombrarme. Será el contraste con lo que tenemos nosotros, el clima, la geografía, sus pueblos y costumbres, y sus gentes. Todo tiene parte de culpa en la adición que me ha creado desde hace tantos años. Cada rincón de ese pequeño pueblo donde nos quedamos tiene un recuerdo personal para mi. Recuerdos de cada etapa de la vida y ahora, cerrando el círculo, con mi mujer y mis hijos. Los primeros pasos de mi hermano, el ir a buscar la leche recién ordeñada, aprender a hacer el nudo del anzuelo para pescar, horas y horas de buceo, horas y horas comiendo pipas de camino al camping y vuelta, juegos de pandilla a escondidas de los padres, mi primer calimocho con amigos del pueblo, las verbenas de los pueblos, los amores imposibles, los excursiones a los Picos de Europa, las rutas en bici con mi padre, los descensos en canoa, amigos del sur compartiendo días y ahora viendo en los ojos de mis hijos esa misma rueda de la vida.

No es por dar envidia, pero que bien se está de vacaciones.
Besos y abrazos,

Arturo Reque Mata.