29 de septiembre de 2010

UTILIZA LA BICI SIEMPRE QUE PUEDAS

Como sabéis la mayoría de vosotros el pasado sábado celebramos una salida más de la Masa Crítica por el uso seguro de la bici en Marbella. En esta ocasión, tras realizar un intenso trabajo de concienciación e invitación a todos los ciudadanos de Marbella y grupos políticos, logramos una gran cantidad de participantes, sumándose entre ellos algunos representantes del PSOE. Así mismo tuvimos una mayor repercusión mediática lo cual se ha reflejado en diversas noticias en los medios locales.

Os enlazo la información que mostró M95 en su informativo del lunes. Como aclaración deciros que, por error de los medios, yo no soy presidente de Masa Crítica dado que este grupo no tiene personalidad jurídica alguna y funciona únicamente bajo comunicados vía redes sociales.

Saludos para todos y utilizad la bici siempre que podáis.

Arturo Reque Mata
Arquitecto

26 de septiembre de 2010

AUSENCIAS INJUSTIFICADAS Y MOLESTAS

Imagina una que el protocolo de los mandatarios y poderosos debe ser de las muchas cosas complejas que el ser importante a ciertos niveles conlleva. La agenda de reyes, jefes de estado, ministros y similares estará tan repleta que a más de uno de ellos les dolerá la cabeza al levantarse sólo con pararse a mirarla. Es una de las servidumbres que acarrea el, por otra parte tan deseado, poder, unido a otros detalles, como por ejemplo el que a la bella Princesa de Asturias le duela la planta del pie justo en la noche que ha de ponerse uno de sus modernísimos y aparatosos zapatos de tacón. Por no hablar de intimidades que rozan lo escatológico, pero que no por llevar diadema de brillantes pueden ignorar sí como así.

Creo que estaremos de acuerdo en que el poder por muy erótico que les resulte a los que lo ejercen lleva implícito una serie de obligaciones a las que ese mismo protocolo les fuerza, es decir, habrá momentos de placer en las que el ego baile de contento, y otros por el contrario de aburrimiento y cansancio, o aún más, de dificultad y hasta de miedo.

Sirva lo anterior como introducción al tema de hoy, empezando por la pregunta que no dejo de hacerme hace ya bastante tiempo. ¿Quiénes son los que dirigen el citado protocolo, de los Reyes y Príncipes en primer lugar, y deciden las audiencias que tendrán, las inauguraciones que habrán de realizar y –lo que más me interesa- los lugares del país que deben visitar? La pregunta sirve igualmente para los mandatarios políticos, desde el primero hasta el último de ellos. En concreto, para el Presidente actual de la Junta de Andalucía, señor Griñán, y antes para el infumable señor Chaves.

Porque en el caso de que sean ellos mismos los que lo hagan, o al menos lo propongan, me gustaría saber la causa exacta de elegir alguno de esos lugares y no otros en un mismo espacio de tiempo; aclarando conceptos, no entiendo las visitas repetidas a ciertos sitios salvo el que en los mismos ocurran hechos de especial significancia que lo justifique. Si se fijan en los diarios y crónicas sociales, los herederos al trono han viajado a tierras asturianas oficial y privadamente un número tan alto de veces que hasta un ciudadano del Artico Polar se daría cuente de la querencia personal que les lleva hasta allí. Conste que nada tengo en contra de Asturias, uno de los lugares más hermosos de España y al que me unen lazos muy fuertes.

Igual podría decir de algún otro al que todavía seria menos entendible las continuadas visitas de reyes y príncipes, salvo explicaciones casi secretas que no vienen al caso. España es por variada y extensa un país que lo tiene todo, bosque, playas, montañas y mesetas, pero es necesario destacar que por encima de eso debe ser considerada como lugar común para quienes lo rigen sin que algunos detalles por parte de estos resulten discriminatorios y francamente molestos para pueblos y ciudades.

No recuerdo ya los años que han pasado desde que el rey Juan Carlos y su consorte hicieran una visita oficial a Marbella (si es que la han hecho alguna vez) pero si, las muchas que hicieron siendo Principes de España, mientras gobernaba el general Franco. Supongo, que si nos visitaban, no debía resultarles desagradable u hostil nuestra ciudad, en la que se fotografiaban en posturas variadas con el insigne Don Rodrigo, por entonces casi o más afamado que ellos. Posiblemente la existencia del General fuese uno de los motivos de tantas visitas, debida cuenta de la empatía que entre el palacio del Pardo y la sacristía marbellí tenía lugar por esos tiempos. Parece que la corona debió hacerles cambiar de gustos u opinión, ya que su ausencia resulta ya tan prolongada.

Por favor, la excusa generalizada de que todo se debe a la presencia como alcalde durante un tiempo del señor Gil –al que Dios tenga afortunadamente en su gloria- no es válida puesto que antes y después de él siguen sin posar sus reales pies en nuestra tierra. Algunos pensamos que debido a esos tristes años y como compensación a una normalidad democrática por fin alcanzada, sería necesaria la presencia real para que en exterior del país se considerasen nuestros logros. No hace falta que abandonen el palacio de Marivent. Una visita oficial, televisada y en color sería suficiente. De paso, podrían aconsejar a los Príncipes de Asturias que se dejasen caer en cualquier momento, y si me apuran la inauguración del nuevo Hospital de San Juan de Dios, emblemático lugar de nuestra historia, sería la ocasión perfecta.

En cuanto al señor Griñan, el espacio de este artículo se me ha agotado sin decir con todas las letras que otro gallo cantaría si el Ayuntamiento tuviese un color distinto. Pero que si piensa arrivar por estos lares cuando las elecciones estén en su apogeo, se puede llevar el abucheo del año unido a la indiferencia de muchos que no entienden como el Presidente de los andaluces todavía no ha visitado el lugar más turístico y que más relevancia tiene –perdonen el golpe de chauvinismo- de su Autonomía.

Ana María Mata
Historiadora y novelista

23 de septiembre de 2010

ACCESIBILIDAD SOCIAL

Las ciudades deben estar en continua regeneración y adaptación a las demandas de la sociedad. Está claro que el vehículo privado motorizado está en decadencia en cuanto a sostenibilidad -aunque se siga considerando un motor de la economía- y consecuentemente, la tendencia generalizada va por la peatonalización, los medios de locomoción no contaminantes (la bicicleta) y el transporte público.

En Marbella, tenemos los propios ejemplos de adaptación de la ciudad. En las últimas décadas se ha ido peatonalizando el casco antiguo -antes se podía llegar en coche hasta la misma Plaza de los Naranjos- o la peatonalización -con una vía mixta para paso para vehículos autorizados- de una parte del paso marítimo comprendida entre el Skol y Marbell Center. Y así otras tantas. Es evidente que cualquier cambio, a priori, parece inviable, se presenta como caótico y problemático. Pero la historia nos ha demostrado que el ser humano se adapta inmediatamente a esos cambios y los hace parte de su vida en cuestión de semanas.

Por lo tanto no veamos como utópico o imposible el carril bici en Marbella. Solo hace falta que se estudie correctamente la demanda de los ciudadanos y no se realice desde la distancia, con soluciones tipo que no responden a la idiosincrasia del lugar.

 Desde estas líneas aporto unas sugerencias personales al buzón de las “ideas ciudadanas”:

- Fomento del uso de la bicicleta: Actos de promoción, día del pedal, fin de semana en familia con la bici por el centro, circuito urbano infantil para educación vial, etc. Predicar con el ejemplo...

- Actuaciones inmediatas para los usuarios actuales: Recuperación de la vía verde del Paseo Marítimo (delimitación de un área para circulación de bicicletas), aparcabicis estratégicamente repartidos por la ciudad (colegios, centros deportivos, áreas libres, zonas culturales, etc). Aprovechar las áreas libres existentes (Arroyo de la Represa) y las obras de transformación de travesías existentes (A-355).

- Redacción un plan de bicicarriles que complete y ejecute lo establecido en el PGOU (Contando desde la fase inicial con la participación ciudadana).

No se debería dejar pasar la ocasión actual donde los ritmos de vida están más cerca de la bici que del coche, donde la sostenibilidad y la concienciación ecológica de la sociedad están latentes en cada acontecimiento. Tenemos la oportunidad de dejarles algo positivo a nuestros hijos para que no caigan en el ritmo frenético marcado por la globalización. Ahora podemos hablar con alguien de China o Australia sin límites técnicos, pero nos olvidamos del que tenemos al lado. Debemos recuperar las distancias cortas. Accesibilidad social.

Arturo Reque Mata
Arquitecto

SÁBADO 25 DE SEPTIEMBRE.  11:00
SALIDA POR EL CARRIL BICI EN MARBELLA
TERRAZA SUPERIOR DE PLAZA DEL MAR.

19 de septiembre de 2010

EN EL PAIS VECINO

Resulta curioso como, en el amplio concepto que abarca la palabra “moda”, puede entrar desde lo más aceptado por el curso de los tiempos, que es el vestuario o la decoración, hasta el nombre de un autor literario o su última obra, para llegar incluso a determinarnos los lugares que debemos visitar. No sólo eso, sino que, ahondando en ello, de unos años para acá, nadie es nada, desde el punto de vista viajero ni logra el título de turista experimentado si no ha hecho al menos uno o dos cruceros internacionales en uno de los gigantescos y apabullantes barcos que numerosas compañías nos ofrecen a diario.

Aceptando desde el principio que esta opinión, totalmente personal, no sólo no va a ser compartida por muchos, (más bien pueden llegara a considerarme retrógrada o pedante) intentaré explicar mi desapego hacia el barco-hotel majestuoso de cuyas maravillas ya se encargan los operadores turísticos y folletos en propagar.

Viajar es en esencia, trasladarse de un lugar a otro. Nada que objetar en que bajo ese punto da igual el hacerlo en diligencia, como nuestros mayores recuerdan, ferrocarril, carretera o barco. Se trata de hacer un pequeño análisis de por qué y para qué viajamos y ello incluye el llamado viaje de placer, o sea, el viaje que hacemos para disfrutar de lo que cada cual entienda por eso. Lo digo, porque hay –al parecer- quienes encuentran agrado en los viajes de negocios en los cuales como aves migratorias vuelan de un sitio a otro en el menor tiempo posible, sin recordar después ni el nombre de muchos de los lugares donde posaron sus pies por breve tiempo. Hay por cierto una película reciente del bello G. Clooney que viene al pelo sobre el tema.

Quien escribe, sujeta durante mucho tiempo a servidumbres vulgares tales como un buen hotel, comida aceptable, temperaturas no extremas o cualquier otro tipo de comodidades, ha llegado a una edad sin número en la que, sin abominar de ellas del todo cree haber aprendido algo más sustancial y primario : el placer buscado en el hecho de viajar, consiste, especialmente en el conocimiento. Conocimiento en vivo y directo, que diríamos, y que va desde los tan afamados monumentos a la aparente sencillez de una calle en un barrio pobre o marginal. Es más, por encima incluso de las calles, plazas jardines o iglesias, puede resultar conmovedor la tristeza de unos ojos de anciano descansando en su banco habitual, la alegría del joven que besa apasionado a su pareja en el interior del funicular, la mujer que bocea pescado en una esquina del puerto o la vestimenta inapropiada de un transeúnte cualquiera. Hombres como nosotros pero diferentes en algo, el lenguaje, las expresiones corporales, costumbres…en definitiva, en aquello que el entorno le ha marcado, dejándole la impronta de la latitud en la que habita.

Y para ese tipo de conocimiento, perdonen, pero el crucero nos proporciona escaso tiempo, a no ser que gustemos de observar como suben y bajan, comen exageradamente, bailan y beben los propios compañeros del barco, lugar donde se realiza en verdad el viaje, acunados por las olas y con el Titanic presente en algunos agoreros.

Me parece que hay pocos cruceros que tengan a Oporto, en el vecino Portugal, como lugar de visita larga en sus folletos. Y es por eso que, después de una larga-corta semana allí, reivindico de corazón una buena excursión a esa capital del país vecino, cerca y lejos a la vez de nuestros itinerarios viajeros. Oporto proporciona tantas cosas al conocimiento y al placer que nadie puede abandonarla sin sentir un poco de “saudade”. Tal vez el Duero le regale ese tono dorado que envuelve a la ciudad y que se hace tierra en los bancales escalonados de sus cuestas, donde se produce el vino que da fama a su nombre, y la Torre de los Clérigos, cual Giralda barroca dominante sea el faro conductor para llegar a la Plaza de Batalha, a la Catedral y después bajar hacia Vila Nova de Gaia y pasear por la avenida Gustavo Eiffel. El impresionante desfile humano de la avenida peatonal de Santa Caterina puede distraer al viajero incluso de sus hermosas tiendas y cafés, donde el Majestic muestra su señorío. ¿Y qué decir de la ciudad que posee la Libreria Lello, considerada la más bella de Europa? Una joya cuya visita justifica por sí sola el viaje.

Oporto está considerada Patrimonio de la Humanidad por la Unesco. Su aparente decadencia en el Casco Antiguo, conservada expresamente, se complementa con su desafiante arquitectura vanguardista. Es de verdad, una ciudad de ensueño, aunque no aparezca mucho en los cruceros. O como decíamos antes, una ciudad “de cine”. Me siento en el deber de aconsejarla como destino de viaje.

Ana María Mata
Historiadora y novelista

6 de septiembre de 2010

CON LA EDUCACION NO SE JUEGA

(Artículo publicado en el diario Marbella Express del 5 de septiembre de 2010)

Debería volver Valle-Inclán, créanme. Ojalá la reencarnación tuviese lugar con el ilustre escritor y pudiera disfrutar en vivo y en directo de aquél peculiar estilo que le concedió renombre en la literatura universal. El esperpento es hoy el dueño absoluto de la política nacional y provinciana. Tenemos políticos que sin haber leído –quizás- a Valle, ejercen su profesión como si fuesen personajes de cualquiera de sus obras y están consiguiendo que la sociedad que representan se asemeje cada vez más a la que tan magistralmente el escritor recrease en sus obras.

Pero no estamos en el 98 ni deberíamos permitir que la estupidez, por muy colosal que sea, o debido precisamente a ello, presida nuestro presente ni condicione el mañana de nuestros hijos y nietos. En la hora de las tecnologías máximas y los más rebuscados sistemas operativos, es injustificable desde todos los puntos de vista que quienes se dedican a gobernar sean ineptos o lo que es peor, piensen que lo somos aquellos a quienes gobiernan. El juego es buena cosa cuando de niños se trata, es más no sólo es bueno, sino necesario, como dicen los educadores y psicólogos. Divertido también, de ahí el interés que sienten los críos. Pero querer jugar a cierta edad y con determinados elementos, entra en lo catalogado de aberrante o vocablo que se le parezca.

Con la Educación, que es de lo que se trata. Un concepto especial donde los haya, que por desgracia en nuestro país solemos tratar con indiferencia, relegándolo incluso a los últimos puestos de interés político y social, traduciéndose luego como consecuencia en financiación escasa, con únicamente las sobras de los llamados presupuestos del Estado. Y así nos va. No hace falta recordar que estamos en la cola europea en este tema donde me temo que seguiremos estando durante un largo e indefinido tiempo.

Pero vayamos a lo particular, a nuestro pueblo en concreto. Como si de emular al celebérrimo Nadal de hoy o al Santana de ayer se tratara, Junta y Ayuntamiento se dedican desde hace tiempo a jugar con el problema educativo lanzándose uno al otro la “pelota” en cuestión que es ni más o menos el lugar y hábitat donde construir las necesarias escuelas que demanda el aumento de población.

El Ayuntamiento debe ceder terrenos y la Junta construir escuelas. Parece fácil de entender, ¿verdad?, pues no lo es, o al menos no quieren que lo sea ambos estamentos, que se han dedicado los meses anteriores al juego absurdo de “la culpa es tuya” en lugar de tratar de solucionar el problema. Personalmente, y sin tener ya hijos en edad escolar, expreso con total claridad en estas líneas que me parece vergonzoso por parte de quienes gobiernan o quieren hacerlo que a estas alturas del calendario hayan estado mareando la perdiz para conseguir al final unas aulas prefabricadas que deben estar listas en menos de diez días.

A pesar de mi gusto por las metáforas y demás instrumentos literarios, en esta ocasión voy a ser directa y sin más rodeos que los escritos al empezar. ¿En manos de quienes está la educación de unos niños que para empezar no tienen siquiera unos locales dignos? ¿Por qué no se han adjudicado por la Junta de Gobierno Local las parcelas de hace dos día en su momento justo? ¿Y qué ocurre con el Albergue Africa para que la Junta lo rechace una y otra vez como ubicación escolar?

Las respuestas son tan fáciles que hasta me indigna escribirlas. Porque a unos y otros les importa poco el funcionamiento del sistema educativo en Marbella. He dicho poco, y he debido decir nada, hablando sin eufemismos ni vaguedades. Porque a los dos estamentos les interesa, en primer lugar seguir en el poder, ganar las elecciones y después, una vez conseguido ese objetivo, dormirse en los laureles de la indolencia, , fotografiarse por cualquier majadería que realicen, criticarse por idénticas tonterías y que el pueblo siga creyendo las enormes falsedades de sus aburridos discursos.

Sobre sus espaldas deberá caer la responsabilidad de no haber concedido al problema de escuelas y cualquier otro referido a la educación, la importancia que tiene en la formación de hombres y mujeres, hoy todavía en edad infantil.

No me pidan el voto mientras actúen de esta forma. Me temo que somos muchos .

los que hemos perdido la fe en ellos, cualquiera que sea la sigla que representen.

Para verlos discutir o lo que es peor, luciendo galas y caras almibaradas en fotos y reportajes, prefiero entretenerme con las bobadas del “HOLA”.


Ana María Mata
Historiadora y novelista

1 de septiembre de 2010

DOS MINUTOS DEL DÍA

¿Quién no puede perder dos minutos de su día para contemplar lo que le rodea? 
Este experimento que estamos realizando, de manera artesanal, con el móvil y sin trípode, pretende demostrar como la visión reiterada y en el tiempo de una misma escena puede provocarnos reflexiones y emociones.

Esperamos vuestras opiniones.

Arturo Reque Mata
Reque+Gallego Arquitectos