28 de marzo de 2012

MALA IMAGEN

Desde hace un tiempo me hago la siguiente reflexión: Pese a la "mala imagen" para los que nos visitan, ¿merece la pena -tal y como están nuestras arcas públicas- seguir espurreando arena (polvo gris que más parece cemento) en nuestras céntricas playas? Hasta un niño de 3 años sabe lo que va a durar su fortaleza de arena que hizo con tanto cariño al borde del agua.

 Tenemos muchos kilómetros de bonitas playas, con sus dunas, rebalaje y bancos de arena -salvadas por los pelos de la especulación inmobiliaria- que deberían ser nuestra imagen de sol y playa en el exterior. Se debería reforzar la conservación y calidad de esas zonas para evitar su degradación y tentación de explotación mercantil... También necesaria, pero en su debida dosis de equilibrio sostenible.

El pueblo que éramos creció y le ganamos terreno al mar, edificaciones en primerísima línea, paseos marítimos, puertos, chiringuitos, etc. Piedras, hormigón y arena sobre el mar, en difícil pulso de poder. Y claro, a la Naturaleza le podemos dar una patada en la espinilla, dejarla maltrecha, pero al final se repone y SIEMPRE acabará ganándonos.

Fotografía de Órfilo Aranda
Sinceramente, mientras no se estudien y se realicen soluciones que estabilicen la arena de nuestras playas del centro, no me interesa lo más mínimo su estado actual, me da igual la imagen. Si se me queja algún turista le explico otras decenas de playas donde podrá disfrutar de nuestro mar (si el saneamiento integral no nos juega una mala pasada y arruina el baño con sus irresponsables vertidos) y me quedo tan a gusto.

Y como en todas partes tenemos conocidos, sólo lo sentiría por esos amigos que tienen negocio de hamacas o chiringuitos en zonas del centro. Pero estoy seguro, que pese a las piedras, con tal de no moverse unos metros, el personal seguirá fiel a la playa delante de su apartamento, malhumorado, pero se quedará ahí.

Evidentemente nada es tan simple, pero mientras las administraciones oportunas se aclaran sobre qué hacer, el dinero que tan generosamente se está tirando al mar, se podría invertir en crear las conexiones necesarias desde el centro hasta las playas del exterior, de manera que se pueda acceder dando un paseo o en bicicleta. Pero es es mucho pensar y estamos de resaca post-electoral.

Arturo Reque
Arquitecto

3 comentarios:

Dragón del Viento. dijo...

Lo increible es que a veces la realidad supera a la ficción. Los anuncios engañan a los turistas extranjeros e inversores vendiendo la imagen de una Marbella idílica donde las playas son maravillosas y los ciclistas son poco menos que los protagonistas urbanos en un ambiente slow city. Pero luego nos encontramos con la cruda realidad de chapuceras playas tercermundistas y ciclistas prohibidos y multados en el Paseo Marítim. Este anuncio de playas maravillosas y ciclistas en Marbella os va a encantar. ¿Será un anuncio con ironía?. http://www.spain.nu/article.595.html .-

Anónimo dijo...

¿ Quien fue el que quito los espigones de las playas de Marbella ?

¿ Poner arena todos los años ?

2011-09-15

Defensora del Pueblo:
"Si una persona no sabe gestionar dinero público, debe quedar inhabilitada"

ES "UN CLAMOR EN LA CALLE"

La defensora del pueblo pide que el despilfarro del dinero público sea un delito

Solicitará al Ministerio de Justicia que estudie con "toda seriedad y rigor" su inclusión en el Código Penal.

Anónimo dijo...

A la espera de una solución definitiva para el litoral

http://www.diariosur.es/v/20120329/marbella/espera-solucion-definitiva-para-20120329.html

29.03.12