10 de enero de 2012

LA VERDAD DE LAS MENTIRAS

(Artículo publicado en el diario Marbella Express el 9 de Enero de 2012)

Vargas Llosa dio el nombre arriba expuesto a un brillante ensayo sobre autores del siglo XX en el que explicaba como los relatos se escriben para transformar las inquietudes y los sueños, alterándolos e incluso tergiversándolos con mentiras para compensar las limitaciones de la vida real. Poco imaginaría el Nobel que esta definición casi textual podría ser la explicación también de nuestro flamante gobierno, de acuerdo a su actitud antes y después de las elecciones que acabamos de pasar.
Nueve días después de ser elegido, el señor presidente acordó una serie de medidas, que no solo contravenían sus promesas electorales, sino que se alejaban de lo esperado, y que, por mucho que Bruselas estuviese en su pensamiento al hacerlas, demasiado son los expertos que las cuestionan, y opinan otras formas muy distintas para su realización.


Estaremos de acuerdo en que la cosa está que arde, y en momentos así ni a una pedante literata -como servidora se reconoce-, le apetecen metáforas ni subterfugios líricos.
El gravísimo problema económico obliga a reformas drásticas que no pueden eludirse. Hasta ahí, todos de acuerdo. Veamos como entiende y opina el hombre o mujer de la calle, sobre dichas reformas y recortes. La primera pregunta del ciudadano es sencilla: ¿Por qué no han empezado desde arriba a realizarlas? Ejemplos : Con impuestos a las grandes fortunas, y gravámenes a las Sociedades que encubren la mayoría del dinero de las mismas. Con exclusión de prebendas a políticos, como coches con chófer, tarjetas especiales de crédito, jubilaciones excesivas…etc, teniendo en cuenta que la mayoría de ellos al dejar de serlo, consiguen puestos tan relevantes como direcciones de empresas millonarias, asesorías políticas o financieras, conferenciantes, presidentes de alguna Fundación y demás artilugio que se nos escapa al ciudadano corriente.
 La cuestión sobre la existencia del Senado y a la vez las Diputaciones es otra que  debería resolverse definitivamente para evitar gastos inútiles o al menos no necesarios en este difícil momento. El asunto de las Comunidades Autonómicas es quizás el que más dinero arranca de las arcas de un estado tan débil como el de hoy. Alguna solución deberá ser más útil que la reciente utilizada para cubrir la deuda de cerca de 10.000 millones de la Generalitat Valenciana. Escandaloso ejemplo que nos lleva al interrogante del por qué quienes eran sus gestores o responsables no están literalmente encarcelados. Estamos acostumbrados, negativamente por cierto, a que los autores de robos, desfalcos, corrupciones y malversaciones, sean como la distracción televisiva o periodística de cada informativo, como actores de una negra comedia de enredos donde ellos son los triunfadores, y los demás  tontos pasivos y calladitos. Empezamos a estar cansados de un cliché tan repetido y nefasto. Un sainete sin gracia en el que siempre pierden los mismos.
Si el nuevo gobierno quiere hacer las cosas bien, debe, forzosamente realizar una Reforma Laboral, que profundice en la raíz del asunto más grave dentro de la crisis : el desempleo. No habrá cambios significativos mientras no haya Rebajas Fiscales para los Autónomos y Pequeñas y Medianas Empresas, puesto que ellos son los auténticamente perjudicados que además reciben la nueva carga de impuestos. La Reforma Fiscal, debería acarrear también la desaparición del impuesto sobre Sucesiones, y activar la alarma en lo relacionado con la evasión de capitales y las citadas Sociedades encubiertas.
He leído en algún sitio que las medidas del primer gabinete de Rajoy muestran, junto al incumplimiento de las promesas electorales, una falta de audacia verdadera y de imaginación. Me adhiero a lo arriba escrito. También es destacable la posible nueva forma de contratos que bajo el nombre de “Mini-Job” pretende establecer pagos mínimos por menos horas de trabajo, y al que, debido a la desesperación, pienso, una encuesta de Sigma Dos concede el 49’6% de jóvenes a favor y el 36% en contra. Comprensible en quienes aceptarían cualquier cosa para sobrevivir. La misma desesperación que ha llevado a los habitantes de diferentes pueblos pequeños a disputarse la ubicación de un Cementerio Nuclear. Las cosas están así. Negras. Alarmantes. Tristes. Depresivas para quienes se han formado concienzudamente y no tienen alternativas a su alcance. La  impotencia es un demonio íntimo al que hay que intentar aplacar pero no se consigue ayudando a Bancos y sometiéndose a Europa. No únicamente con ello.
Tal vez haya quien no sepa que en la Francia de 1789, la revolución comenzó por la clase media, burgueses, contra los favoritismos y enjuagues de Nobles, Aristócratas y Reyes. Después llegó a lo que llegó. De no haber existido la Revolución Francesa estaríamos aún en el Medievo. Atención a los ciudadanos llamados de a pie. No tienen por qué imitar al Job de la Biblia.

Ana  María  Mata
Historiadora  y  novelista   
     

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Explicación de las medidas adoptadas ...

Google : Rajoy Merkel ayuda

Google : Rajoy Merkel Obama

Anónimo dijo...

Con un ojo en Alemania y otro en Andalucía

http://blogs.elpais.com/la-voz-de-inaki/2012/01/con-un-ojo-en-alemania-y-otro-en-andalucia.html

la-de-marbella dijo...

Yo no te creo pedante en este articulo. Sinceramente hablas con claridad meridiana cosa que en este país cada vez es mas difícil escuchar.Priman los mercados y los intereses de las deudas, que solo benefician a los que crearon el "embolao", sobre las personas. El estado de bienestar que hemos conocido y no hemos podido o sabido o querido reconocer desaparece como arena entre los dedos ante nuestra desolación e impotencia para pagar y pagar a entes oscuros.Me pregunto hasta donde vamos a llegar para contentar los intereses desmedidos de tan pocos. Muy buena tu entrada, como siempre.